Autore: José Miguel Correa Lavandero
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4m 27sunghezza
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Subir hasta La Ermita en mi Tina Tern fue muy sorprendente por varios motivos. Casi la mayoría de los que suben camino a Farellones son ruteros o mountain bikers, y yo que soy la excepción a la regla. Muchos de ellos se daban vuelta a mirarme incrédulos, casi como quien ve un ovni o un fantasma. Lo que no saben es que la experiencia fue de lo más agradable, casi tan fácil como hacerlo en MTB. En la bajada, se comportó de manera excepcional, con gran control en las curvas y a muy buena velocidad, llegando a los 65 km/h. Quizás algún día las plegables conquisten la cima de Farellones, veremos quien se anima y acepta el desafío.